domingo, 21 de septiembre de 2008

VOLVER A EMPEZAR OTRA VEZ

Así es, septiembre ya ha llegado y un nuevo curso escolar ha comenzado. A preparar libros, libretas, bolígrafos, ordenadores portátiles, braille’n speaks (en nuestro caso), y demás ¡que empezamos!

A continuación vamos a explicar como es nuestra vida como estudiantes en el instituto, aunque primero me gustaría aclarar que aunque ha habido y todavía hay algunas escuelas únicamente para ciegos (actualmente sólo en Madrid y Sevilla en sus respectivos CREs) la mayoría somos de Educación Integrada, es decir, estudiamos en centros normales, con compañeros videntes y profesores que no tienen ni idea de braille, generalmente. Estas escuelas para ciegos poco a poco irán desapareciendo, puesto que lo que se intenta es integrar completamente a todos los invidentes en la sociedad, sin problemas, sin pegas, sin barreras.

“Suspiré. Era ya la última hora del Miércoles y el insoportable profesor de Matemáticas explicaba fórmulas y fórmulas e la pizarra. “Odio las Matemáticas y las seguiré odiando toda mi vida” pensé cuando aquel hombre cuya voz me atemorizaba a pesar de ser profunda (he de decir que por lo general me gustan ese tipo de voces profundas y varoniles) se dirigió a mí.
-¿Has hecho los ejercicios? –me preguntó.
-Sí –me apresuré a contestar. Puesto que estaban escritos en Braille él no tenía forma de saber si yo decía la verdad o no.
-Bien –me dijo dándome un golpecito en el hombro como hacía siempre…”

Como puedes ver, la joven de esta historia es invidente, como nosotras, y estudia en un centro normal, con un profesor que no sabe braille, una asignatura que estudia cualquier otro estudiante, etc., como nosotras. Aquí la protagonista nos cuenta que odia las matemáticas y que las odiará siempre. Pero, ¿cómo hace para estudiar matemáticas? O mejor, ¿cómo estudia? Estudiar, lo que se dice estudiar para un examen, lo hacemos igual: coge apuntes, repasa resúmenes, rehaz ejercicios… El problema quizá se podría plantear a la hora de leer lo escrito en la pizarra, de escribir, etc. En el primer caso sí necesitamos de la colaboración del profesor, y a veces incluso la de un compañero de clase, para que vayan diciendo en voz alta lo que se va escribiendo en la pizarra. Las matemáticas, en este caso, son un poco más complicadas de entender, pero con algo más de esfuerzo por parte del alumno y el profesor se puede conseguir. Luego hay otras asignaturas como Educación Plástica, en la que también se necesita más ayuda del profesor, y en ocasiones incluso algo de adaptación (utilización de plastilina, arcilla, materiales para crear relieves…). Para asignaturas como historia del arte o geografía en que continuamente aparecen imágenes, gráficos y mapas, existen láminas en relieve de catedrales, cuadros, mapas, etc. Y por último, en asignaturas como Educación Física, también se requiere un poco más de colaboración por parte de los compañeros, puesto que algunas de las clases no están al cien por cien adaptadas para invidentes y es algo más complicado. Pero en fin, con un poco de esfuerzo por parte del profesor, si está dispuesto, y por parte del alumno, todo se consigue.

Por otro lado, los textos, los libros, los exámenes, etc., necesitamos que estén en braille o bien escritos a ordenador, para que mediante éste, nosotros podamos acceder a esta información. Para ello existe una unidad de trascripción en la ONCE que continuamente transcribe dicha información a braille, y a la que debemos mucho por su esfuerzo.

Y ya por último, también comentar que uno de los servicios que presta la ONCE es el de apoyo en la educación. Cada afiliado estudiante tiene un profesor de apoyo que acude ciertos días a su centro de estudios para resolver dudas al estudiante y a sus profesores, conseguir material necesario (libros, láminas, etc.), para transcribir algún pequeño texto a braille…

En resumen, que cualquier invidente puede estudiar como cualquier otra persona, únicamente necesita tener adaptado el material y algo de ayuda del profesor, como leer en voz alta, lo escrito en la pizarra. Después solo faltan las ganas y… ¡a estudiar!

¡Esperemos que nos vaya bien este curso, que ya estamos en Bachillerato!

3 comentarios:

David dijo...

bueno chicas: sé que soy típico, pero quería daros la enhorabuena por el blog. Para la gente que no conoce la vida diaria de un ciego yo creo que es muy ilustrativo y seguro que abre más de una mentecita que está cerrada. Seguir así que os lo curráis un montón. Y si queréis algo, ya sabéis donde estoy. Lara: a ver si coincidimos en algún sitio, que no vienes a vernos a alcoi, desastre de persona jajaja. Bea: a ver si nos conocemos en persona y cantamos como es debido. Un abrazo fuerte y un besote pa cada una.

Anónimo dijo...

Eh!! Que yo sí que quería ir al concierto!! Pero pensaba que era el 4 de octubre!! Jooo, yo que quería que me cantárais la canción del Perro Guía! xDxDxD A la próxima ya sabéis, a Onil!

Anónimo dijo...

MMM... yo estoy en un cre, y no es que desaparezcan, es que se van a cerrar para no admitir a una persona para hacer la secundaria.
Va a ser del tipo... si necesitas refuerzo en matemáticas (que asco de asignatura xd) pues vas allí tres meses, un año... pero luego sales de allí. No vas a estrar más de 1 o 2 años allí, simplemente va a ser para reforzar, cambio de código lector...
Y ya se está poniendo en marcha la cosa esa, pues a 4 de eso va a entrar una que está en bachillerato... Cada vez admiten a menos gente.. En fin, al de sevilla le quedarán unos 3 o 4 años mal contados.